Descubrí la Metamedicina a través de los libros de Claudia Rainville.

Un día, una amiga me comentó que había un libro que explicaba cómo las dolencias o enfermedades podían provenir de sentimientos y emociones ligados a nuestra memoria emocional. En aquel entonces, ya había comenzado un proceso de crecimiento personal que me ayudó a ganar mucha más confianza, pero algo dentro de mí me decía que necesitaba profundizar más y comprender mejor por qué ciertos patrones se repetían con frecuencia en mi vida. Así que, sin conocer ni al autor ni el título de este libro, descrito por mi amiga, por casualidad (pero nada es casualidad), mi esposo, durante una de nuestras visitas a la librería, encontró en un estante el libro de Claudia "Cada Síntoma es un Mensaje", y así comencé mi viaje con la Metamedicina.

Al principio leí todos los libros de Claudia Rainville; luego, buscando en internet, encontré la página web de Metamedicina y vi un seminario sobre "Liberando la Memoria Emocional" en Verona, mi ciudad natal. Decidí inscribirme, a pesar de bastante resistencia, pero con gran entusiasmo. Con la ayuda y la sensibilidad de maravillosos profesionales, me encontré trabajando mucho en mí misma. Una vez que abrí el vasto espacio de las emociones, incluso con momentos de dolor, poco a poco comprendí los patrones que me frenaban. Uno de ellos fue la imposición que sufrí de niña por parte de mis padres, quienes, con la consciencia que tengo ahora, entiendo que ellos también sufrieron lo mismo de sus padres. Esta imposición, vivida de niña, me impidió tomar decisiones por mí misma de adulta. Todo me fue impuesto: elegir una escuela, un trabajo, dónde vivir. Y cuando intentaba hacer algo que había elegido, algo que me daba satisfacción, en cuanto estaba a punto de tomar forma, lo boicoteaba, lo destruía todo, porque no me daba el derecho a elegir algo para mí, algo que me hiciera feliz. Más tarde, también trabajé en otros patrones. Con la Metamedicina, comprendí lo que mi Niña Interior intentaba comunicarme a través de la incomodidad o un estado de inquietud. Y con el amor y la confianza que le di a mi Niña Interior, ella me ayudó a superar muchas pruebas. Naturalmente, sigo "pelando la cebolla", y cuando encuentro una pequeña tarea que hacer, sé que me estoy acercando a mi verdadera esencia, cada vez más libre de las condiciones limitantes que encontramos a lo largo de nuestra existencia. Agradezco a todos los Operadores de Metamedicina, "Trabajadores de la Luz", como los llamo, que me ayudaron a creer en mí misma para poder convertirme en una guía para otros, y por supuesto, agradezco a Claudia, quien con su gran Amor nos dio la "alegría de descubrir cómo ser nosotros mismos". Además de utilizar las claves de la Metamedicina, participé en un curso de formación profesional en Comunicación Sistémica Integrada y un Curso de Liderazgo Generativo en Comunicación Sistémica Integrada impartido por el Prof. Giancarlo Terracciano (Life Coach y Executive Coach en PNL), asistí a cursos de formación sobre interpretación de sueños con Marie Noelle Urech, asistí a un curso avanzado “Muchas Vidas, Muchos Maestros” de regresión a vidas pasadas con el Dr. Brian Weiss y asistí a cursos de “Descodificación Biológica Transgeneracional”, “La Memoria Emocional de la Vida Uterina” y “Regresión a Vidas Pasadas” con el Dr. Jesús Casla.